martes, 30 de junio de 2009

XTRO

Esta es la típica peli que, cuando la ves de chaval, te deja traumatizado para toda la vida, y es que estamos ante un material notablemente bizarro (empezando por ese título casi inpronunciable) de origen Británico, y quieras que no estos siempre van un pelín más allá que los yankees cuando les dejan (no olvidemos que allí surgió el temible fenómeno de los "Video Nasties"). El caso es que el film en cuestión, por casi coincidencia de fechas, fue lanzado jugando con el que era el mega-taquillazo de la época, "E.T. El Extraterrestre". En la publicidad de "Xtro" destacaba la frase "Algunos extraterrestres no son amistosos". Algo nada gratuito si tenemos en cuenta que ambos films juegan con una premisa parecida, la amistad de un niño con un bicho del espacio. Claro que "Xtro" se decanta por el lado más oscuro y terrorífico del asunto.
Un padre de familia es abducido por marcianos. Tres años después, regresa a la tierra con el fin de recuperar a su hijo. Sobre esta base tan sencilla, el realizador (y responsable de la -también- extraña pero efectiva banda sonora) Harry Bromley Davenport nos sumerge en una pesadilla de lo más inquietante repleta de momentos francamente raros, raros, raros, generosos en surrealismo y que, a la larga, son aquellos que todos los que la vieron de chavales conservan en su memoria de forma inalterable. Por ejemplo, el niño (al que su padre marciano ha dotado de poderes) dando vida a sus juguetes con fines mortales, destacando sin duda el madelman aumentado de tamaño. Molan también el payaso con su yo-yo cortante o la secuencia de la chica convertida en máquina de fabricar huevos alienígenas atrapada dentro de un gran capullo (idea esta que luego retomaría, en cierto modo, "Species 2"). También resulta flipante la aparición de una pantera negra en medio del recibidor (!!!) o, cómo no, el renacer del padre -tamaño adulto- a través del vientre de una pobre mujer. Francamente burro. A esta lista de instantes para el recuerdo incluimos ese final totalmente perturbador.
Como dato curioso, comentar que en el reparto nos encontramos con Maryam d'Abo, muchacha que unos años después se convertiría en chica Bond (junto a Timothy Dalton en "Alta Tensión") y que en "Xtro" no se muestra nada mojigata, algo que empujó a que, en el momento de su mayor popularidad, un crítico creyera descubrir su "oscuro pasado" al mencionar que había participado en una película de "terror pornográfico" (!!!!!). También, si miramos en los créditos, encontraremos a Robert Shaye como productor ejecutivo, fundador de "New Line" y por entonces dedicado enteramente a promocionar el género.
Como sabéis, muchos años después a Davenport -quien, curiosamente, tenía un concepto muy bajo de su propia película- le dio por dirigir dos secuelas con dinero americano y canadiense. El resultado, en ambos casos, estaba en las antípodas de las intenciones, formas y logros de la primera peli. Vamos, que eran dos mierdas como dos camiones especialmente esforzadas en imitar el universo de "Alien". Podéis leer la reseña de la segunda parte que yo mismo escribí en este blog no hace mucho. Vistas ambas, reafirmas lo que ya sabías de antemano, que sin llegar a ser redonda, ni una maravilla, "Xtro" está repleta de momentos genuinamente espeluznantes y representa una forma de hacer cine que, en esencia, ya se ha perdido del todo.