lunes, 13 de septiembre de 2010

NI SE TE OCURRA... (DEJAR DE VERLA)

Me dio por sacar los vhs, y vi que tenía esta película, la cual conservo por no poder conseguir en dvd, teniendo, no obstante el recuerdo de que se trataba de una película de lo mas deleznable. Que equivocado estaba. Habré visto esta peli tres o cuatro veces, siempre con el prejuicio ( y más en la época) de que “Cruz y Raya” eran unos humoristas de los mas asquerosos (así era y así es, aunque ahora por separado, y aunque haya disfrutado de la parodia de Al Pacino / Bobby De Niro de José Mota). Tras verla, y reflexionar fríamente sobre lo que acababa de ver, llego a la conclusión, de que es tal el desbarajuste, el cutrerío, la dejadez y que a pesar de todo esto la peli no funcionara mal en taquilla, que me quito el sombrero, la califico de “obra maestra en lo suyo” y entra a formar parte de mis “peores favoritas”. Las pretensiones de esta película, son tan meramente comerciales, que al final lo de menos es la propia película… Tenemos a “Cruz y Raya”, lo que es una garantía de taquilla, entonces, ¿para qué coño nos vamos a currar la película? Pero es que además, tiene la fortuna de, en su caos, contar con algunos de los gags tontos al más puro estilo “Spoof”, más graciosos que he visto en mi vida: El rubio, pide una caña en la barra de un bar, y este recibe una caña de bambú. Pide que “le pasen la china” y alguien le lanza a una mujer oriental. Alguien pide algo para picar, y recibe un pico de albañil, que se clava violentamente en la mesa y así toda la película… un “tour de force” de chorradas, con las que me entró la risa tonta, y que recordándolo, aún me dura. Sobre todo destaco la estúpida aparición de E.T. que no viene a cuento y con el peor chiste de la película, que no se puede contar, hay que verlo.
Y cuando digo que la peli es lo de menos, es porque, si en los títulos de crédito se dedican a mostrarnos sketchs mejores o peores, parece que al principio va a tener argumento, dos jóvenes estudiantes de “Artes escenitas Venezolanas” que al comprobar la poca salida que tiene su carrera, deciden buscarse la vida hasta que acaban de “espanta-clientes” en una discoteca. Justo en el momento que entran a trabajar en la discoteca, la película se sumerge en un caos narrativo, que no respeta cronológicamente los hechos (hay escenas que deberían salir antes que otras… mal montada, supongo que de manera voluntaria, da la sensación de que importaba tres cojones como quedara… ¡Increíble!) y si había una pequeña trama, esta desaparece a favor de los gags.
Además tiene una virtud; no solo es una película, que va. Es además ¡un jodido concierto de “La Frontera” filmado en cine!, si, para llegar a la hora y media y teniendo en cuenta que seguramente no existía un guión, entre escena y escena se nos cuela una actuacioncita del grupo de marras, que en la época ya no estaba ni de moda y se cantan unas siete canciones. A una media de tres minutos, tirando por lo bajo, por canción, unos 21 minutos de actuación en directo. Hay que tener dura la cara.
Pero el colmo de la jeta, está en lo siguiente: Se ve que el equipo de filmación, disponía de una discoteca, en la que transcurre el 70 % de la película. Pero claro, llenarla de extras para dar ambiente, supondría un pastón para la producción… ¿cómo solucionarlo? Pues de la manera más ingeniosas. Se inventan un personaje, el gerente de la discoteca (Guillermo Montesinos), que con tres clientes dice que tiene el bar lleno… “- A ver si se me despeja el local”, dice el hijoputa…. Con lo que prácticamente la película entera vemos en esa disco a “Cruz y Raya”, el gerente y el grupo “La Frontera” que no se baja del escenario… ¿no les parece genial la solución? Solventar una carencia con la creación de un gag, es obra de un genio, un maestro de la poca vergüenza. ¿Y quien anda detrás de esto? Pues no un cualquiera, si no Luis María Delgado, con una larga carrera a sus espalda, y todo un clásico de este blog. NI SE TE OCURRA, es su brillante testamento.
En el cast, nos encontramos con Concha Cuetos, Rafael Alonso, Ángeles Martín, Pedro Reyes, Antonio Gamero, Willy Montesinos o José Lifante. Un reparto de lujo ¡encima¡.
Tremenda, si la ven con los ojos que le corresponden a esta película, verán que es una genialidad y la disfrutarán tanto como yo la disfruté. Es una locura. Y lo más curioso, es que en la época, no hubo ninguna habladuría acerca de la calidad de esta película.
Producida por Warner Española, ¿A que esperan estos gilipollas para hacer una edición especial con los extras que existan en DVD? Y más ahora que José Mota triunfa en televisión.