viernes, 15 de octubre de 2010

ALTITUDE

Ahí va una buena idea desaprovechada, amigos. Que lástima. ¿Unos chavales que se van de finde en una avioneta, se meten en una tormenta y de pronto, son atacados por un monstruo gigantesco estilo Lovecraft?, ¡¡tremendo!!, ¡cuantas posibilidades!..... pues bien, como digo, "Altitude" las desaprovecha todas ellas, de la primera a la última.
Sin embargo, el mayor problema de esta peli no es ese. Lo peor de "Altitude" es su grupo protagonista. Jamás había visto con anterioridad unos jovenzuelos más repugnantes, repulsivos y odiosos. Vayamos por partes. La prota es la típica chavala que de niña perdió a la madre y vive atormentada por ello. Ha crecido y, cómo no, se ha transformado en una tía escultural y guapísima. Su novio, un guaperas tímido de ojos azules que conoce tanto el pensamiento de Jean-Paul Sartre como es aficionado a coleccionar comics antiguos estilo E.C. La rubia -guapa- que lo graba todo con su video-cámara (y que, tras un buen rato de peli dándonos la chapa al respecto, luego se olvidan del aparato). Su novio es un jugador de futbol americano garrulo y chuloputas (piensas, ¿realmente un tío así puede tener novia?... sí, puede, tal y como son las féminas). Y finalmente, el cuarto de la panda, guapo también, que toca en un grupo de rock and roll y lleva el pelo a lo "emo", peinado palante y de lado. Con semejante plantel, el viaje que supone "Altitude" resulta más infernal para nosotros que para ellos.
El caso es que estos gilipuertas pillan el avión y tiran parriba. Entran en una enorme nube negra en la que nada funciona. Los controles quedan inutilizados por un oportuno accidente y se crea el caos dentro del avión. Gritos y berridos y berridos y gritos. Constantes peleas que, llegados a un punto, suenan totalmente repetitivas y comienzas a aburrirte. Bien, llevas 50 minutos y el supuesto monstruo volador apenas se ha dejado ver fugazmente 5 segundos. Llegamos a la hora y poco, y aún no ha salido. ¡¡Bueno, cojones!!, ¿pero donde está?. Pues el bichejo no entra en la ecuación hasta los últimos 20 minutos.... y encima, el motivo de su existencia es tan RIDICULO como el modo de hacerlo desaparecer.
Por el camino nos hemos aburrido muchísimo y nos hemos sentido estafados. ¿Culpa de la falta de medios?, para nada, el acabado técnico del film es bueno. De hecho, lo poco que vemos de la criatura está muy bien facturado. Sencillamente se trata de que los autores se han emperrado en centrarse en los conflictos humanos de los odiosos personajes y en fin... que no les ha salido muy bien. Hubiese sido un detalle que, al menos, no nos engañaran utilizando al ser apocalíptico como reclamo!!.
En dos palabras, decepcionante y aburrida.