viernes, 14 de abril de 2017

EL EXTRAÑO AMOR DE LOS VAMPIROS

Con un título internacional tan “Exploitation” y tan vigente como es “The Night of the Living Dead”, “El Extraño Amor de los Vampiros” es una de la peores muestras del cine patrio sobre vampiros, y por ende, del Fanta-Terror Español.
Cuando acabé de ver este suplicio me quedé perplejo, ya que como en otras muchas ocasiones, no sabría redactar una sinopsis que nos cuente la película a grandes rasgos. Porque es que no hay un argumento que sea detectable. Y consultando Internet, la cosa no mejora; las sinopsis escritas son igual de confusas que la misma película. Haciendo un esfuerzo: En un pueblo se suceden unas misteriosas muertes, las cuales, los habitantes del lugar, achacan a los moradores de un castillo próximo al pueblo. Una mujer con una enfermedad mortal, acaba enamorándose  del conde del castillo, el cual resulta ser un Vampiro, como el resto de los que le acompañan. El pueblo quiere acabar con ellos, pero como la enferma está moribunda, no sabe en que bando posicionarse, si en el de los humanos o los vampiros.
Un argumento romántico y hasta en cierto punto interesante, que nada tiene que ver con las imágenes que nos muestra la película.
Dirigida por el sobrevalorado León Klimovski, que nunca fue bueno pero aquí está especialmente incompetente, lo que instó a que yo viera la película con especial interés, fue lo siguiente: De adolescente, cuando escuchaba el “Polvo de Estrellas” radiofonico de Carlos Pumares, el crítico siempre hablaba de los guiones que había escrito para el cine, entre ellos “La Casa de las Chivas”. Sin embargo, había una película que de especialmente mala hablaba de ella siempre en tono despectivo, decía que era espantosa y, por vergüenza, nunca decía el título, pero no tenía problema en especificar Pumares, que se trataba de una película de Vampiros. Y me quedé con las ganas de saber cual era, y con el paso del tiempo, también mi interés por verla. Así que con la era de Internet, ni me acordé de esa película de terror cuyo guión firmó Pumares. Según IMDB, los firma en paternidad con Juan José Daza.
Sin embargo, recientemente, que Pumares ofreció una entrevista a su ya avanzada edad, más sabio, y sobre su dilatada carrera, no tuvo ningún problema en reconocer que, efectivamente, los críticos –él incluido- suelen ser directores de cine frustrados que no saben hacer las películas como ellos mismos dicen que han de ser, y como ejemplo puso las escrituras de sus guiones, revelando para mí, cual era aquella película sobre vampiros que escribió: La que nos ocupa. También  reveló que aunque el guión está firmado por él y por Juan José Daza, en realidad Daza no escribió ni una sola palabra del mismo, y que se le añadió a créditos por temas meramente burocráticos, pero que a la vista de los resultados, tanto da.
En cualquier caso, es más la anécdota del guión de la película, que la propia película lo que nos interesa, porque ¡demonios! Hacía muchísimo que no me aburría tanto con una película. Una incapacidad absoluta no solo a la hora de dirigir, sino también de iluminar y encuadrar, amén de que lo que estamos viendo es una sucesión de escenas, sin orden ni concierto, en los que vemos a una serie de buenos actores divagar y soltar absurdos diálogos escritos por Pumares. Tela. Efectivamente, se trata de una cinta insoportable. Directamente, no se puede ver. Hay que ser muy masoca. Una puta mierda.
Naturalmente, la pasión de los fans del Fanta-Terror, les hará encontrar en ella puntos positivos, incluso habrá quién la endiose y la tilde de obra maestra; Vayan a buscar a sus blogs, porque aquí no van a encontrar nada de eso. Amamos el cine de terror, pero no decimos que estas mierdas sean buenas por el mero hecho de que son de terror.
En fín, un despropósito de los de verdad. Véanla, y háganlo por eso, por ser un despropósito.
En el reparto destacan las presencias de Emma Cohen, Carlos Ballesteros o José Lifante haciendo de Vampiro por enésima vez. Todos, por el contrario, estupendos actores.