jueves, 20 de febrero de 2014

LOS PICAPIEDRA ENCUENTRAN A ROCKULA Y FRANQUESTONE

De vez en cuando me suelen dar misteriosos, raros y desperados ataques de nostalgia en lo referente a un producto que a mí, ni fu, ni fa: la animación. De vez en cuando me acuerdo de lo feliz que era de pequeño con según que  dibujos animados, me obsesiono, los busco y me los como con patatas. Este verano me ocurrió con “Popeye”, y fue una experiencia harto  gratificante. Si ya era fan del personaje, ahora ese fanatismo se reforzaba, y no solo a los “cartoons” del personaje facturados por la factoría Fleitcher; el Popeye ochentero, también es muy bueno, por ejemplo, no hay más remedio que  consumirlo casi todo. Así que desde este verano,  me voy agenciando todo material audiovisual  referente al marinero más famoso de todos los tiempos, que se cruza en mi camino. Sin despeinarme.
Y durante estos días, me ha pasado algo similar, pero con el efecto contrario. En los ochenta, emitían por televisión “Los Picapiedra” y a mí me encantaba. Y decidí, igual que con el Popeye, echarme algo de esto a los ojos. Como empezar con la serie me parecía muy heavy, no ya porque no esté muy bien numerada, sino, porque váyase usted a saber la de episodios que ha de haber… pero recordé que existía un largometraje – animado- en el que “Los Picapiedra” se las tienen que ver con unos ineptos Conde Drácula y monstruo de Frankenstein, que me encantaba, y que debía existir de alguna manera porque yo recuerdo haberlo visto. Pensando que no iba a encontrar nada al respecto, al menos en castellano, investigo un poco (no mucho) y enseguida la localizo, curiosamente, en un portal dedicado al cine de terror.
En él, Los Picapiedra ganan un concurso de disfraces de Halloween y el premio son unas vacaciones en Rócksilvanya en el castillo del Cónde Piedrácula. Como es inevitable, Pedro y Wilma se llevan con ellos a Pablo y Betty, y comienza la velada  romántica en el castillo.
En una de estas que el Conde Piedrácula se despierta de su letargo de 500 años, y al ver a nuestros protagonistas, este queda prendado de los encantos de Wilma, por lo que Los Picapiedra tratarán de escapar de Frankenpiedra, que intentará capturarlos para entregarle a su amo a Wilma.
La cosa está en que la factoría de “Hanna- Barbera” no es la de “Fleischer” ni la de “King Feature Sindicate” de Popeye, y si la serie de los sesenta era buena, este largometraje destinado al mercado de la televisión es bastante mediocre, por mucho que se saque a Los Picapiedra de su hábitat “Piedradura”. Los 50 minutos que dura el telefilme se hacen eternos y aburridos, y quizás para un tierno infante resulte, pero no para un adulto, público este que en su momento se ganó “Los Picapiedra”.
También hay que tener en cuenta que la serie data de los años sesenta mientras que esta película es de 1979, entonces yo creo que la diferencia es enorme, no notándose en la animación, pero si en la estructura y la historia.
En definitiva, un coñazo. Huelga decir, que tras esta experiencia, ha desaparecido todo  interés hacia “Los Picapiedra”por mi parte, aún a sabiendas de que se trata una de las mejores series de animación de todos los tiempos.
De título original  -en castellano neutro-  “Un encuentro con Piedrácula y Frankenpiedra”, los señores de la mítica distribuidora “Grupo Aguila” simplificaron el título de la película dejándolo simplemente en “Los Picapiedra encuentran a Rockula y Frankenstone” en su edición en VHS, Beta y sistema 2000.
Dirige este telefilm  Ray Patterson, director de la mayoría de series de dibujos animados que te puedas imaginar, desde 1950 hasta 1993. Es decir; 
Los Pitufos”, “Los Snorkels”, “Don Gato”, “Popeye”…
Ya que estamos, decir que el debut (animado) en el largometraje, lo hicieron “Los Picapiedra” en la película “The Man Called Flintstone” de 1966, conocida en nuestro país como “El Súper agente Picapiedra” y que fue un éxito de taquilla, para después continuar con lo más parecido a una película, que sería esto que acabo de comentar, y protagonizar un tercer largo en 1987 con “The Supersonics meets the Flinstones”.
Por otro lado, ya en plenos 90, alguien decidió llevar a “Los Picapiedra” al cine en imagen real, y lo hicieron con “Los Picapiedra”, dirigida por Brian Levant (“Este chico es un demonio 2” “Un padre en apuros”) e interpretada por John Goodman y Rick Moranis, y la mucho más entretenida “Los Picapiedra en Viva Rock Vegas” del mismo director, pero esta vez con Mark Addy y Stephen Baldwin (¿).
No se a los niños de hoy en día lo que todo esto les puede parecer.