lunes, 7 de agosto de 2017

PEPE, NO ME DES TORMENTO

“Pepe, no me des tormento”, producción de José Frade un tanto extraña,  resulta una rara avis a todas luces dentro de la comedia Española. Porque de manera totalmente involuntaria, esta película toma los arquetipos de la “Comedia Madrileña” de finales de los setenta y primeros ochenta, personajes intelectuales con profesiones dentro del ámbito artístico, y le da una vuelta a todo eso, convirtiéndose, sin saberlo, en una parodia de los Truebas, Colomos y Gutiérrez Aragón de la época. Es como si se introdujeran esos personajes en una película de Angelino Fons, por poner un ejemplo de lo más chabacano. Todo ello servido con una zafiedad y una cochambre que contrasta con la alegre y vistosa fotografía, que le da un toque extraño a toda la película, otorgando una imagen también poco habitual en la comedia española de la época.
Llena de gags, unas veces surrealistas, otras ingeniosos, y de sal gruesa la mayoría de las veces, “Pepe, no me des tormento” resulta una película atípica en cualquier caso, desde sus protagonistas, que no son los habituales en este tipo de comedias de los años ochenta, Emilio Gutierrez Caba y Luis Varela, hasta la presencia de una Cecilia Roth, recién salida de hacer “Arrebato” con Zulueta, que estando casi todo el metraje desnuda, da gusto verla de lo buena que está. Aborda un registro cómico a la vieja usanza, y lo hace con solvencia.
Cuenta la historia de dos amigos de la infancia que llevan toda la vida juntos, que han de escribir un guion cinematografico en ocho días. El como se distraen de las más variopintas formas, para nunca llegar a ponerse a escribirlo, componen el grueso del argumento.
Dentro del reparto, también destacaría la presencia de Carla Antonelli, la primer diputada transexual, que miren ustedes por dónde, interpretando asimismo a un transexual, en un momento que ha de vestirse como un hombre, nunca lo parece, incapaz de trasmitir masculinidad. Muy curioso,
La película, que cumplió su función en la taquilla llevando a cines a unos casi 180.000 espectadores, apareció en vídeo con la carátula que adjunto abajo, que tratando de explotar el humor más desmadrado de la época que no está, sin embargo, tan presente en la película, añade al titulo unos puntos suspensivos para convertirlo en más zafio todavía, pareciendo la cosa un estúpido juego de palabras en el que el espectador, al ver la carátula asocia el título a la sodomía. Me explico; “Pepe, no me des… (cambien los puntos suspensivos por un más contundente “por el culo”) tormento”, y ya tenemos el gag hecho. Espero haberme explicado bien.
La dirección corre a cargo de José María Gutierrez González, quien tan solo dirigió cuatro largometrajes, de los cuales, el más popular sería “Los Autonomicos” a mayor gloria de Juanito Navarro y Antonio Ozores, en la que dirigiría un guion de Mariano Ozores.
“Pepe, no me des Tormento”, sería una curiosidad muy extraña, rara (y desperada) que resulta un divertimento de lo más simpático.